EL CAMINO DE LA COSTA. ¿Por tierras de Pola de Siero, o de Noreña?
La Pola de Siero en 1895.
Sigo rumbo a Sancti Salvatoris
Ovetensis a través de los concejos de Villaviciosa y Sariego, recorriendo
diversos ramales y variantes durante los cuales he visto y comprobado algunos
olvidos, que se puede decir que algunos de ellos ofenden, como es el caso del Camino
del monasterio de Valdediós a la vera del río, y que une Casquita con Valdediós
por Conceyeru.
Y sabiendo o intuyendo que los historiadores
por lo general no son buenos caminantes como deducción de sus “permanentes
olvidos”, además de estar sujetos muchos de ellos, y en muchas ocasiones a los intereses de los
distintos lobbies, jacobitas y religiosos universitarios, etc., en suma,
paganinis de muchos estudios y encuentros, pues durante años vengo siguiendo el
rastro de esos otros caminos que han quedado fuera del campo de
observación jacobeo de corte académico, tal y como ha sucedido en Asturias y en
otras regiones.
Castiello. Desvío a Valdediós y Arbazal
En los artículos anteriores he
ido planteando lo sucedido con el Camino de Valdediós, ese que nos lleva a los
peregrinos en permanente ascenso a través de las Camocas hasta el lugar de Castiello,
y desde cuyo enclave nos hace descender a los sufridos romeros hasta el
monacato de Boides (Valdediós) para una vez visto y disfrutado del centro
religioso, aunque hace ya años que no se puede dormir en dicho lugar y ni penetrar
en el pues está cerrado a cal y canto, pues una vez concluida la visita que es
lo más que se puede hacer es volver a subir, y las guías y los estudiosos al
uso , la propuesta de subida, salvo honradas excepciones es hacerlo por la
actual carretera hasta San Pedro de Ambás.
Como además hay un persistente desconocimiento
muy muy tenaz, puedo decir sin temor a equivocarme que dichos estudiosos no
parecen haber trabajado muchos con la cartografía y menos pateado la zona, pues
se deja ver que en general han pesado más las cuestiones patrimoniales que las
religiosas en algunos planteamientos, y viceversa también.
Tal vez por ello cuando han
abordado la caminería en el entono de Valdediós para dar salida a los romeros
suelen hacerlo hacia la aldea de Arbazal, y sin mucho miramiento se hace
mediante el retorno por la actual carretera hasta San Pedro de Ambás, sin
reparar en que hay un antiguo vía denominada: Camino de los Amortajaos.
Una ruta que utilizaban los
romeros de Puelles que iban hasta Arbazal para subir en andas a la Virgen de
las Angustias los lunes de Cincuesmas, o sea cincuenta días después del domingo
de Resurrección de cada año
Ese día subían hasta su asiento, o
sea que iban desde Puelles pasando Valdediós donde comenzaba la ascensión que
se hacía por el lugar de Llaneces hasta alcanzar la aldea de Arbazal que era su
destino final. Eso sí el viejo camino una vez alcanzada la actual carretera AS-113,
está comido por la vegetación.
Peregrinación de la Virgen de las
Angustias (foto de Vicente Rivero)
Por lo cual desde Valdediós se
sigue enviando a los romeros carretera arriba cuando en realidad estos podían
salir, bien por dicho camino hacia Arbazal, o seguir por el valle de Boides
hacia las aldeas de Vallinaoscura y Villarrica y salir de est modo al Alto la
Campa.
Esa es una, la otra es que para
ir a Valdedios ya lo he explicado no hace falta subir a Castiello por las
Camocas, sino que simplemente con seguir a la vera del río de Valdedios hasta el
lugar de Conceyeru y luego por la Cruz o por Puelles llegar al Monasterio de
Valdediós.
Es toda una paradoja que la niña bonita
del senderismo en Villaviciosa, sea un sendero como los Molinos del Profundu,
para ver molinos semiderruidos, y que Villaviciosa no haya hecho nada para
articular una señalización por el camino esta hecho y franco para ver dos de
sus joyas locales y regionales, como son el Conventín de Valdediós, y el Monasterio
de Santa María. Es eso, una paradoja.
Aldea de Vallinaoscura
Pero como en La Villa, a veces uno
tiene la impresión de que la vocación jacobea es más de boquilla y folclórica
que otra cosa, pues nadie revindica esa señalización del Camino de Boides
como paso peregrino hacia Valdediós, camino llano y entretenido para
peregrinos y paseantes autóctonos, pero digamos que entidades públicas y
privadas, pues eso pasando que es gerundio.
Bueno hasta nos permitimos tener
un vandalismo reconocido y conocido, pues he de notificar que en la zona del
Mayorazu en estos últimos tiempos han querido arrancar una señal del Camino de
Santiago, que ha quedado toda retorcida, y se han llevado tres señales del Camín
de Covadonga, y ahora como no podían llevarse la última por los temas de
anclajes y altura, pues han cortado el árbol donde estaba la señal, ya saben lo
del refrán: «muerto el perro se acabó la rabia».
Lo cierto es que debía de
estorbar mucho el enviar a los romeros por caminos y prefieren mandar a la
gente romera a transitar por la carretera VV-5.
Señal vandalizada
Realizada esta disquisición, sigo
con mi Camino en pos del Sancti Salvatoris Ovetensis camino adelante,
bien realizando la variante de Arbazal o por Vallinaoscura para de este modo
pasar a Sariego, realizando las concernidas variantes, como la de San Román, y
sus iglesias, o las variantes hacia la Vega de Poja, ya comentadas,
Llegados a Pola de Siero tras haber dejado atrás la ermita de Ntra. Srª de la Bienvenida y su antigua venta denominada de la de Uña, más otra venta la del Rebollar, y tras salvar el río Nora por el puente de Recuna los romeros entraban en La Pola donde les esperaba la manduca y un merecido descanso en el antiguo «hospital de San Pedro de los Albergues, que fue importante a la hora de otorgar la Carta Puebla a la tierra de Siero «Por hacerles bien” mantener el orden público, defender a las personas y sus pertenencias, Alfonso X, en Burgos el 14 de agosto de 1270,» precisamente para que hicieran villa y poblaran el lugar.
En la época medieval rezaba bajo
tal nombre, y en la edad moderna- nos dice Sanz Fuertes- estaba bajo la
advocación de los mártires san Fabian y san Sebastián. Dicho alojamiento se
remota a 1141 en cuya fecha fue fundado en el lugar de Rioseco por doña Ordoñez,
siendo dedicado a «los pobres y enfermos que vagaban por los caminos». Aún hoy
la villa cumple holgadamente con esa función alberguista.
Iglesia Parroquial de Pola de Siero, en su sótano está la capilla de los Mártires.
Anotar algo que se recoge en
otros lugares y es que debido al gran tránsito de gentes por los caminos: pobres,
vagantes, viajeros, esto hace que las instituciones benéficas asistenciales fueran
en aumento y empezaran como nos dice la historiadora a realizar «las funciones
de hospedería en esa recta final del camino que conducía a San Salvador de
Oviedo».
Sin quitarle un ápice de razón a
Mª Josefa Sanz, habría que reclamar como parte de la explicación la existencia de
peregrinaciones ya en la Alta Edda Media en base a los hitos salvadoreños, con un
doble objetivo, por un lado, venerar las atesoradas reliquias de la Cámara
Santa y la figura del San Salvador, y por otro, estaba el poder ver, comprobar
y contar el nacimiento de nueva Jerusalén visigoda levantada por la
estirpe de Alfonso II, y rematada por este.
Dejamos la historia y nos ponemos en Camino
Tras haber hecho noche en la
activa villa polesa, toca ahora realizar la última etapa, precisamente la que
va entre Pola y Oviedo, y es en este tramo dónde nos damos de bruces con una histórica
pelea sobre una cuestión no menor ¿Por dónde carajo iba la ruta jacobea, por el
Berrón o por Noreña?
Y es que, llegados a este punto, hay que decir que es igual que el gran polígrafo Gracia Noriega nos haya dejado antes de irse al Oriente Eterno su sentencia - que ya data del 2012- en el que decía «en relación con la polémica sobre si Noreña está o no en el Camino de Santiago, debe tenerse en cuenta, en primer lugar, que no hubo un solo camino, sino multitud de caminos, e incluso que cada peregrino trazó su propio camino».
Sí se repasa la prensa regional
se puede comprobar que cuatro años más tarde, el tema volvía a la palestra de
manos del profesor Carlos González, que consideraba «que la ruta de Santiago
por el enclave de Noreña llevaba camino de convertirse en eterna, dadas las
diversas posiciones o interpretaciones que estaba suscitando el mencionado
trayecto».
Tal vez dicha la renciella
tenga que ver con cuestiones político-territoriales, ya que dentro del
territorio o concejo de Siero se incrustó el condado de Noreña, tan famoso por
otra parte por su vinculación a la Iglesia, puesto que sus obispos eran condes
de Noreña, y que gobernaron junto con los poderosos señores Rodríguez Álvarez
de las Asturias, el citado condado.
- Línea color azul Camino de Noreña
- ·
Línea color naranja. Camino de Pola Siero
Por si esto fuera poco, el médico
noreñense José Manuel Fanjul Cabeza, ha sido un activo militante de la reivindicación
del venero jacobeo noreñense, y para llevar adelante su tarea ha publicado un
par de libros a modo de repositorios, titulados: Noreña en el Camino de
Santiago de Pola de Siero a Oviedo, Itinerario y Entorno (2019) y un año
más tarde: El Camino de Santiago por la Ruta de las Costa hasta Oviedo y su
paso por Valdediós y Noreña.
Libros de Jose Manuel Fanjul Cabeza sobre Noreña y el Camino de Santiago
En esta última publicación expone cosas muy curiosas, como que «El itinerario real del Camino de Santiago a través de la costa -o el litoral en este caso- no es cosa de Noreña ni de Siero, ni de Valdediós; es historia de Asturias» y pese a ello él sigue dándole al pilón reivindicativo de Noreña como paso histórico del Camino, puesto que opina que su villa condal «es la referencia más antigua del camino francés de Asturias», y como es de la opinión de que este Camino debe ser debidamente reconocido como tal, hasta le ha buscado un título: El señorío de Noreña en el Camino de Santiago de Pola de Siero a Oviedo'.
Placa en memoria de una fundación hospitalaria
No obstante, las fuentes
históricas (aunque muy escasas) están ahí, y merece la pena repasarlas y
tenerlas en cuenta, entre ellas hay que añadir a lo ya expuesto, por ejemplo,
que este territorio mucho antes de que fuera Condado, tuvo un hospital-albergue,
uno en el año 991 y otro en 1076, más allá del luego creado años más tarde bajo
la advocación de Ntra. Srª del Rosario.
Sin duda aluna Noreña fue uno de
los puntos claves en el seno de la caminería en la Alta Edad Media como también
lo fue El Berrón. En ambos lugares confluían o se entrecruzaban rutas de lo más
diversas como que unía Tarna con Gijón proveniente de la Calzada romana La
Saliámica, o aquellos otros caminos que iban de este a oeste, bien procedentes del
oriente de bien por la rasa costera de Llanes a Ribadesella y Villaviciosa, o por
la depresión mesoterciaria desde Panes a Oviedo, a través de cuyo eje se
estableció en un momento dado el Camino de los Francos, cuyo recorrido
el Principado de Asturias ha colonizado en estos últimos meses con su afamado Camino
de los Santuarios que ya empieza mostrar sin apenas coger vuelo, sus
diferentes problemas.
Señal atada con cuerdas apenas 2 meses de su colocación
Nos expone el profesor Carlos González
que «la comunicación viaria directa entre el hospital de peregrinos de Río Seco
y ¿Fontefortia? está atestiguada en la primera mitad del siglo XII. En esa
misma centuria se reconocía una «canale antiqva» al oeste de la actual Noreña,
que los romanos seguían hasta el enclave de Lugo de Llanera. Esta ruta
discurría entre belgas y brañas (abelgas et branias), que todavía hoy son
reconocibles en la toponimia de la zona. La antigua «canale» confluía en la
villa de Nautiana o Nozana, en las inmediaciones de la actual Viella, para
tomar rumbo norte en dirección a Lugo de Llanera».
Y prosigue que, ante ello, cabe
«la pregunta que ahora se hace ahora inevitable: ¿debe entenderse que en el
siglo XII existían ya otras rutas consideradas más modernas y paralelas a la
«canale antiqva» romana? Parece lógico pensar que efectivamente era así, y que
ya eran practicables otros caminos alternativos entre Noreña y Nozana.
Puente de Colloto
Desde este último punto, y según
la dirección que tomaran los peregrinos para entrar en Oviedo, se podía vadear
el río Nora por dos puntos: cruzando el cercano puente romano de Colloto o bien
siguiendo la ruta noroeste hasta confluir en el puente medieval de Cayés, que
ya está documentado a mediados del siglo XIII».
Nos dice Fanjul Cabeza en su
repositorio que el «trayecto oficial se acordó en Perlora en la época de presidente
Tini Areces (Vicente Álvarez Areces)», dejando su apreciada Noreña y su
recorrido concejil reconocido como BIC (octubre del 2014), «en una nube […] y haciendo
tirar a los peregrinos por el Alto La Campa para eludir las iglesias de Sariego,
lo cual no tiene sentido» al menos histórico recalco por mi parte.
Siguiendo esta línea de reflexión
del estudioso noreñense y apasionado de la senda de peregrinaje por su tierra,
como él mismo acostumbra a recalcar, «no inventa nada, sino que se basa en la
documentación existente y da continuidad a la tesis doctoral del profesor Juan
Uría Ríu sobre los caminos del Norte, alumbrada en 1924». Aunque hace aparecer
unas y no otras fuentes a conveniencia para justificar su propuesta y no evidenciando
que la historiografía jacobea ha avanzado bastante y que las visiones de los
pioneros de los estudios jacobeos han
Señalización Camino de Noreña
Con dicha pretensión Fanjul Cabeza recopila en su
trabajo todos aquellos «documentos, inscripciones y piedras» que a su juicio acreditan
«la ruta del Camino desde Irún a través del centro de la región y mapea el
segmento que, pasada Villaviciosa por Casquita y Camoca hasta Valdediós,
desciende desde Alto La Campa y por Sariego continua hacia La Pola, La Carrera,
Noreña, Argüelles, San Miguel de la Barreda, Bobes, Pico Sierra, Colloto y,
finalmente, Oviedo».
Queda clara la posición de Fanjul
Cabeza, dado que Noreña ha tenido su peso histórico religioso, no hay nada más
que ver su escudo, y sin querer herir sentimientos ni abrir el caudal de las susceptibilidades,
y por supuesto sin negar que la presencia de las advocaciones carolingias de la
manso de San Martín de Tours, que podemos ver en la iglesia de la Carrera, o en
la de Argüelles, marcan un hito interesante, aunque dicha advocación es muy
abundante entre las advocaciones parroquiales, ermitas y capillas, dentro y fuera
de los Caminos Jacobeos asturianos.
Y si esa hagiotoponimia ha de
servir de testigo para comprobar la autenticidad de un Camino jacobeo, me
pregunto ¿Qué hacemos entonces con los caminos marcados mediante los inputs
dedicados a San Salvador? A los cuales historiadores,
arqueólogos y geógrafos, les han negado el pan y la sal, y yo no digo que se
señalicen, sino que se estudien esos nuevos factores, y se reconsidere que
dicho fenómeno de la peregrinatio empezó muchos años antes y sus redes camineras
fueron hitadas mediante la existencia de diversas advocaciones salvadoreñas
ligadas a monasterios y hospitales, y como no, a muy antiguas iglesias
prerrománicas cuyas fechas de fundación han caído en el olvido.
Veredas de San Salvador en Asturias
No deja de ser cierto que la
burocracia ha dejado olvidado a Noreña como etapa del Camino de Santiago, al
igual que a los maliayeses con el Camino de Valdediós por el valle de Boides, y
claro que puede resultar molesto a los noreñenses y a otros muchos caminos y
variantes.
Ya lo decía Gracias Noriega que
se debe tener en cuenta que la «política cultural», y otros intereses, es
decir, la burocracia, a menudo tienen poco que ver con la historia e incluso
con la geografía» , y lo hemos podido comprobar con el famoso invento del Camín
de los Santuarios, que ha colonizado todos estos recorridos, sin que nadie haya
puesto el grito en el cielo.
Albergue de Peregrinos de Pola
Siero
El Camino Jacobeo por Noreña
Conocemos el Camino que desde
Pola de Siero arranca hacia Oviedo, y lo hace a través del núcleo de El Berrón,
tramo muy bien señalizado y en ese sentido sigue lo ya indicado por Mª Josefa
Sanz en su trabajo tantas veces citado de El Camino de Santiago por
Asturias. Topoguía de la Ruta de la Costa; que nos dice que «desde Pola
Siero…cruzando el término parroquial de Sn Martín de la Carrera… se desliza el
caminante por la vega fluvial del Nora. Se pasaba por Meres donde se bordeaba
la finca que aloja la capilla y palacio de los Arguelles y se seguía por
Granda…Siguiendo esta ruta, los romeros dejaban atrás, al margen de la ruta
documentada, aunque no muy alejada, la Villa de Noreña…antigua tierra de
señoría y condado de la mitra ovetense.
Pues en esas estamos. Cuando el
peregrino arranca su camino hacia Oviedo es muy posible que le suene algo el
tema de una variante que va por Noreña, aunque no se preocupa, seguro
que, si hay algo, pues encontrará un Panel con explicación sobre esa Variante
Jacobea, si tan importante parece a casi todo el mundo.
Aunque hay que dudar de ello, puesto que, si se busca algo sobre dicha variante o camino noreñense, por ejemplo un track de gps, a buen seguro que no encontrará nada, y sí bien es cierto que el bueno de Fanjul Cabeza aporta documentaciones históricas, no deja de ser cierto que no nos facilita a los peregrinos la caminata, pues lo que expone son viejas referencias perdidas en un marco geográfico que ha sido mil y una veces reformado y alterado por la presencia de diversas vías comunicacional, como las carreteras, las autovías, o el ferrocarril.
Digamos que hay pocas maneras de
seguir actualmente el recorrido noreñense, puesto que donde se produce el
desvío hacia el citado Camino de Noreña, es tierra polesa, y claro no es
posible por problemas burocráticos y concejiles colocar nada, ni Panel
explicativo, ni las flechas de la variante noreñense, por muy histórica que sea,
o por mucha aprobación BIC que haya tenido.
Creo que todavía pesan en el
subconsciente de ambos contendientes concejiles los antiguos conflictos de los
señoríos desde que este terruño fuera arrebatado al «rebelde conde Don Alfonso
por su hermanastro Enrique III, o sea los famosos Trastámara,
principalmente Enrique, conde de Noreña, y Fadrique, gran maestre de la Orden
de Santiago, estos representaban a la nobleza tradicional, conservadora y
antisemita, como siempre muy fuerte en una Castilla y cada vez más distanciada
del dinamismo comercial e industrial de propio país y de la periferia».
Por tanto, la única manera de realizarlo es mediante la página web de Xurde Morán en el capítulo dedicado a: Noreña y Argüelles en el Camino de Santiago en Asturias: historias de peregrinos, zapateros y chacineros, el cual sigue al pie de la letra a Fanjul Cabeza en su libro sobre Noreña y el Camino de Santiago, el cual toma a modo de guión, para aportarnos el recorrido, la historia tanto del Camino como del propio condado obispal de Noreña.
Una vez dejado atrás el
carolingio lugar de San Martín de la Carrea, que fuera muy apreciado por los
peregrinos francos que por aquí pasaron, a buen seguro que ya se habrían
postrado como romeros ante su santo patrono en la iglesia de San Martín de Vega
de Poja, ahora los actuales peregrinos nos damos de bruces con la Autovía
Minera tras haber dejado atrás el esparcido núcleo de El Valle.
En dicho paso elevado, el Camino que
desfila por tierras de Pola de Siero a Oviedo vira a la izquierda, yendo muy bien
señalizado y rumbo al cruce de El Berrón, a donde llega a través del barrio
berronés del Morralín y sale por el barrio de Buenavista en busca de la vega
del Nora, o sea hacia la aldea de Fonciello buscando el cruce del Nora por
Colloto y juntarse con el camino que viene de Noreña.
Punto de desvío
Pero volviendo al punto de desvío, o sea el alto
puente de la Autovía Minera, Xurde Morán nos indica, aunque en poco apoya su
recorrido, pues no hay ni jalones ni flechas, que hay que girar a la derecha e
ir en descenso por el actual camino de servicio de la autovía, para coger el siguiente
desvío a la izquierda que entra hacia La Zaragüela camino de El Molín, donde se
entronca con la carretera de Pola de Siero que por La Carrera va hacia Ferrera
de Abajo, que es por donde nos dice el IGN que va el Camino de Santiago desde
Noreña
Y es curioso porque el Camín
de los Santuarios, que presumiblemente toma como referencia el trabajo de
aproximación histórica-geográfica elaborado por Pedro Pisa, el famoso Camín
sigue los pasos desde el puente de la autovía hacia El Morralín y ahí vira al
norte, por el Rancho Grande, La Pedrera para entroncar el recorrido que propone
Xurde Morán y el IGN, este tramo se conoce como Camino de los Puertos, que sería
el que viene de Tarna y va hacia Gijón.
En este mapa pueden ver la carretera marcada con el símbolo jacobeo; luego está el camino en azul (Xurde-Fanjul Cabeza); y en verde oscuro el Camino de Pola al Berrón; y en rojo el enlace de Camín de los Santuarios. Mucho tinglado de caminos y variantes, y sin apenas señalizar.
Predios como hemos intuido estos
de Noreña, nacidos al hacer de las grandes familias como los Rodríguez Álvarez
de las Asturias, y en cuyos parajes y compañías intervinieron en pro y en
contra de este territorio, lo que motivó la existencia de esta pequeña isla
dentro del territorio poleso, y se convirtiera en un auténtico campo de batalla,
tanto bélico como político, y donde la mitra ovetense estuvo metida de pies y
manos hasta 1951, pese a las diversas políticas administrativa de
secularización de la vida política y la territorial.
A partir de que se sale a la
carretera de Ferrera de Abajo la cual nos permite entrar a Noreña en ascenso, ésta
en el punto culminate nos aporta una cuasi que completa vista sobre la villa
condal, y será a partir de este momento cuando podamos ver alguna flecha
amarilla del Camino Jacobeo, ya que estamos en territorio noreñense y ya es
posible la señalización.
Anexo a este controvertido
palacio, que pasó por varias manos y funciones, se haya una capilla dedicada a
San Joaquín y Santa Ana, la cual fue construida en 1760.
Grafitis en el pasadizo subterráneo
Tras pasar todas esas
infraestructuras mediante dicho pasadizo tan pinturero, se vira a la derecha y
pegados al río se desemboca en una rotonda, donde el peregrino gira en ella y
se va rumbo oeste, calle arriba, tanto Xurde como Fanjul Cabeza, nos marcan
cada zona, cada calle cada esquina, lo que había o lo que no había, pero no
referido a los tiempos peregrinos de antaño, o sea de antes del siglo XV que
parece ser la fecha de paso por estos lares de los diferentes peregrinos,
aunque sabemos que los hubo anteriores, pero los estudiosos que nos conducen
por estos lares hacen hincapié en ese coto de fechas del siglo XV.
Casa de los zapateros
La villa condal de Noreña ha
tenido merecida fama, por dos factores, primero la existencia de un potente
gremio de mansoleas, o sea de zapateros que llegaron dice el Marqués de la
Ensenada a contar en 1751 con 66 maestros zapateros- curtidores, 5 maestros
zapateros, 107 oficiales zapateros y 33 aprendices, tan fuerte fue tal
industria que la villa contó en sus momentos más álgidos con no menos de 350
zapateros que en 1903 fabricaron 150.000 zapatos, aunque el gremio terminó por
desaparecer.
Sin embargo ya en el siglo XVIII
la Noreña empezó a ser Noreña una referencia en cuanto a la industria chacinera
y conservera que alcanzaría cotas de muy alta calidad y producción durate todo
el siglo XIX, y en parte todo ese tinglado fue debido a la pujanza de Pedro
Alonso, nacido en 1856 en Noreña, y emigrante a Cuba de donde regresa en 1907
como rico indiano, desde cuya posición impulsa ya asentado en sus tierra natal
actividades empresariales y asistenciales, incentivó- dice Fanjul Cabeza- la
industria chacinera, construyó viviendas populares, dotó a Noreña de un cine y
fundó el Centro Cultural y Fundación Rionda-Alonso.
Memorial escultórico dedicado a Pedro Alonso.
Toda esta historia que el
peregrino apenas si intuye, pues existen pocas informaciones que nos hablen
como lo hace José Manuel Fanjul Cabeza, calle por calle y casa por casa, lo que
hay, o lo que había...
De ese modo nos damos con el
panel dedicado al Hospital del Peregrino Ntra. Srª del Rosario, situado en
plena calle, y que nos explica que fue fundado en 1593 por Gabriel de Lorenzana
y doña Clara Argüelles, y consolidaron una donación para construir un hospital
para pobres y peregrinos, el cual les daba tres días de albergue necesitados,
dándoles luz, leña, sal y agua. En el año de 1663 se construyó la capilla del
hospital y fundada por Juan de Pubillones, uno de sus parientes andado los
siglos se vincularían con el hiramismo masónico.
Hospital de Pobres y Peregrinos
La villa noreñense guarda mil y
un secretos e historias, liberales como Flórez Estrada, liberales reformistas o
melquiadistas (becerriles) contra de conservadores del Círculo Católico
(chorizos) así los trataba del bueno de Ramón Pérez de Ayala, el de la novela A. M. D. G. (La vida en los colegios de
jesuitas) de 1910, y gran parte de ello lo cuenta Fanjul Cabeza en otro
libro: Noreña Entrañable. (2008).
Placa en memoria de Flórez Estrada
No sé si es hora de la comida,
pues si se ha partido de Pola de Siero aún no es la hora de comer, tal vez si
se ha dormido en La Vega de Sariego, entonces sí que puede apetecer probar una
especialidad de la zona: los callos, que no siempre es un plato apetecido por
los actuales peregrinos, que más bien retuercen el hocico ante su presencia.
Pues lo dicho el peregrino continúa
buscando los azulejos jacobeos en su tránsito que es lo que más se ve en las
esquinas, las flechas son muy viejas y despintadas.
A la par que abandona la villa se
pasa por el acogedor cabildo abovedado de la iglesia parroquial dedicada a
Santa María, la cual aparece mencionada en 1441 con motivo del entierro en su
capilla mayor del obispo de Oviedo y conde Noreña, D. Diego Rodríguez de
Guzmán, que además era su patrono; y como es de suponer tal templo fue
construido sobre otro anterior de tipología románica, aunque aquí y ahora lo
que destaca es el gran armatroste de campanario que le anexionaron a la iglesia.
Iglesia parroquial de Noreña
Una vez se rebasa la iglesia, el
peregrino sale por la larga calle- carretera, signada como NO-1, a cuyo pie de
levantan algunas casas y abundantes naves industriales, la casi que interminable
avenida nos lleva acera adelante sin que nos fijemos que antes de llegar a la
rotonda de la N-634, hay un desvío a la derecha, que vuelve a suceder los mismo
ya estamos fuera del entorno geográfico de Noreña, por tanto el marcaje hacia
la iglesia de San Martín de Tours de Argüelles, parroquia muy vinculada a Noreña,
pues queda fuera del recorrido jacobeo.
Pero surgen dudas ya que, según
la información facilitada por el Ayuntamiento, dice «Una inscripción
situada al pie de la columna derecha, en la puerta sur, reza en latín que la
iglesia fue fundada el decimocuarto día de mayo de la era de 621”. Pero, el
término ‘era’, se refiere a una forma de fechar muy usada en la Edad Media, al
estilo ‘hispánico’ que comienza a contar a partir del año 38 a. de C. por lo
que se considera como fecha probable de su fundación el año 583» y
continua « Otros
datos que el Consistorio pone a disposición del visitante explican que la
referencia más antigua que se tiene de San Martín de Argüelles es la donación
el 20 de abril del año 827 por parte de Ordoño I de este templo a la Iglesia de
San Salvador de Oviedo».
Lo que puede interesar al
peregrino es la representación de San Martín de Tours en la portada, en la
jamba izquierda, el cual aparece con los atributos episcopales, o sea la mitra
y el báculo.
Una vez visitada la iglesia no queda
otra cosa que salir a la Nª 634 y conectar con el sendero que Pola que viene
por El Berrón y con el se entronca en Fonciello en términos de Siero y camino
de Oviedo.
Comentarios
Publicar un comentario